Hoy toca hablar de Hogwarts Legacy, uno de los fenómenos “videojueguiles” de este principio de año y que parece haber convencido a todo tipo de jugadores.
Yo en estos momentos, en los que escribo este artículo, llevo jugadas unas 20 horas aproximadamente, y tengo que reconocer que las he disfrutado mucho, aún no siendo un fan acérrimo de Harry Potter.
Apartado técnico
En el apartado técnico, tanto gráficamente como en el sonoro, el juego es una delicia que va a hacer que te entre por los ojos desde el minuto uno. Y si a eso le sumamos el buen trabajo de doblaje en castellano que han conseguido, de pocas cosas podremos quejarnos en este aspecto.
La fotografía y las animaciones se ven realmente espectaculares en todo momento, no solamente en las cinemáticas, ya que por ejemplo, mientras recorres la academia de Hogwarts, la sensación de estar en un entorno mágico nos acompañará en todo momento.
El sistema de combate

El combate es otro aspecto muy logrado, haciéndolo totalmente dinámico en cuanto al uso de magia tanto para protegerte como para atacar a múltiples enemigos a la vez.
Un sistema de combate que recuerda mucho a juegos como Batman, haciendo que tengas que estar pendiente de protegerte mientras vas encadenando combos de ataque para rellenar la barra de magia antigua que nos proporcionará unos ataques espectaculares que, literalmente, harán implosionar a los enemigos.
De hecho, el sistema de magia con tantos y tantos hechizos puede llegar a abrumar de tantas opciones que tienes. Aunque en mi experiencia, al final acabas usando los tres o cuatro hechizos que más te gustan y dejas de lado los otros por comodidad.
El juego te permite tener 4 hechizos accesibles a la vez, los que quieras de entre los que vayas aprendiendo y hasta 4 grupos de hechizos que puedes ir cambiando pero que no resulta del todo cómodo, al menos en PC.

La historia
Uno de los aspectos positivos que tiene el juego es la historia, que aunque está creada para agradar al fan de Harry Potter, también gusta a los que no conocemos tanto ese universo.
En realidad, la historia que narra el juego no tiene mucho más que ver con Harry Potter, que el que se desarrolle en la misma academia de magia y algunos otros detalles, porque prácticamente ninguno de los personajes que aparecen, pertenecen a la saga principal.
Yo vi las películas hace tiempo y me gustaron, pero nunca me planteé siquiera leer los libros, hasta ahora.
Los hechos que acontecen en el juego transcurren unos 100 años antes del nacimiento de Harry, con lo que ni siquiera Voldemort había nacido por entonces, y por lo que me han contado, el dilema que se plantea en el juego, sí que aparece en los libros pero de forma muy vaga, con lo que los desarrolladores han tenido libertad para crear su historia.

El dilema del elegido

Sin embargo, si que hay algo con respecto a la historia que me chirría un poco bastante y es que desde el minuto uno somos “el elegido”, al igual que ocurre con Harry.
El protagonista del juego no hace nada para merecerlo, no consigue ese estatus de héroe por sus propias acciones, ni siquiera es algo que busque o que le venga heredado por alguna antigua profecía.
Simplemente sucede. Eres importante porque “patata”.
Y esto se lleva muy mal en el juego porque constantemente eres esa persona que todo lo hace bien, que los profesores tratan como a alguien especial y que los compañeros ven como un rival o como un mejor amigo apenas verte por primera vez.
En el juego se habla de una magia antigua que nadie más puede percibir excepto tú y que por supuesto te convierte en alguien muy poderoso.
Un quiero y no puedo
Al menos Harry Potter, su fama venía precedida por unos acontecimientos que habían envuelto de misterio, como fue la muerte de sus padres y que supuestamente hubiese vencido a Voldemort siendo tan solo un bebé (bueno, igual también sonaba un poco absurdo después de todo)

Tampoco el antagonista en este juego, ni los personajes secundarios tienen el carisma de los personajes de la saga de Harry Potter, la verdad.
Tu protector no es Dumbledore ni Ranrok, el gnomo malvado que te persigue constantemente, es un famoso hechicero oscuro del que la gente teme decir su nombre.
De hecho, si nos paramos a pensar un poco, ni siquiera le coges aprecio al protagonista. En una historia, normalmente te presentan el pasado del héroe o algún hecho que te haga empatizar con él y que quieras en lo más profundo de tu corazón que tenga éxito porque te cae bien…
No no, aquí tenemos un protagonista totalmente neutro y sin pasado.

Rendimiento en PC
En general, como he dicho al principio del artículo, el juego es increíble en el aspecto técnico y es verdad, pero mi experiencia ha sido que, al tercer día del lanzamiento, salió un parche y el juego en PC me empezó a ir muy mal. Se atasca cada vez que intenta cargar algo e incluso en las cinemáticas hay parones.
Yo, por mi parte, he pensado en esperar unos días a ver si lo solucionan, para continuar con la trama.
Es algo que se ha quejado mucha gente y que al pasar los días ves que no solucionan, lo cual, tristemente, empaña un poco la experiencia.
Incluso en PS5 parece que va algo mejor, pero me comentan que también se siente que está mal optimizado.
Conclusión
Dejando de lado los problemas técnicos, aún teniendo un muy buen PC, y algunos fallos de guion como los que he comentado más arriba, lo cierto es que Hogwarts Legacy es un juego de notable.
Tanto es así, que muy probablemente esté en la lucha del GOTY (game of the year) este año, a pesar de que estemos en febrero y quede mucho catalogo por salir.
Si eres fan de Harry Potter, te va a encantar la ambientación y poder moverte por la academia de magia y hechicería de Hogwarts. Si no lo eres, podrás disfrutar de un juego de aventuras muy entretenido con un trasfondo que te dejará con ganas de más.
